DE LA VIDA REAL: CAPÍTULO I

Compartiendo casos frecuentes y experiencias en el ejercicio de la docencia de posgrado en las Maestrías de Ingeniería.

Una gran parte de recién graduados empieza a trabajar casi de inmediato y con frecuencia deja de estudiar y actualizarse. El profesional joven se afianza en su puesto de trabajo y madura en el ejercicio de su profesión.

Después de algún tiempo, se le presenta la oportunidad de ascender a un cargo de mayor responsabilidad y enfrenta la exigencia de contar con un diplomado de especialización o un certificado de maestría.

Se matricula en la maestría que más se ajusta a su puesto en la empresa.

Las clases iniciales son traumáticas para el estudiante y para el docente.

El tiempo transcurrido desde la graduación a la fecha, pesa demasiado.

Ha olvidado los temas de clase o son demasiado nuevos para el. Un caso común se aprecia cuando el alumno Inicia la maestría en la mención en Sistemas de Gestión de Calidad, pero no conoce Pensamiento Sistémico.

Otro caso muy común se aprecia en alumnos de la maestría en Gerencia de Operaciones (Cadena de Suministro, Logística y Manufactura) que no conocen el concepto ni el objetivo de la Gestión por Procesos.

La situación se vuelve crítica cuando el alumno manifiesta que dichos conceptos nunca los conoció en pregrado. La alternativa es solo una: Enseñarle ambos conceptos para que logre entender los de posgrado.

La primera vez que me ocurrió esto, comprobé que el alumno había dicho la verdad. El currículo de ingeniería industrial de su universidad de origen no incluía los prerrequisitos de nuestros cursos de posgrado.

En los siguientes Capítulos de este blog denominado “De la Vida Real” expondremos las alternativas de solución que han sido aplicadas para solucionar el recurrente problema que hemos expuesto en este post.